Me hacés temblar


Me haces temblar por dentro,

como el miedo a recordar,

algo que no sabemos

pero que nos da miedo igual.


Pienso que es muy raro el evento

y que suele salirnos muy caro,

el hecho de ver tus poemas dibujados

por otro ser igual de eterno.


Por eso será que le dicen misterio

y ahora que lo pienso es la ansiedad,

la que me nubla el entendimiento

y casi no me deja pensar.


Imaginá que mi teoría fuera cierta

y que está escrito todo lo que dibujás.

Las burbujas tienen certezas,

aunque estas suelen explotar.


Me siento un idiota

cuando estoy frente a tu boca

y me pienso un ilota,

que lucha contra molinos de viento.


Será que por eso no hago intentos

o tal vez será por eso que calla mi boca,

las palabras que de mi alma brotan

cuando te escribo lo que siento.


Y cuando la alegría me desborda

me entran olas de autoestima,

y las serenatas me brotan

pero las traduzco en poesías.


No hay para mi nada más romántico

que lo armónico del pensamiento,

es un himno al intelecto

todo lo que por tu cabeza ha pasado.


No recuerdo cuando fué la última vez

que estuve frente a un espejo

y me ví a mí misma por dentro,

a la vez que me pude entender.


El afán por besarte se transforma

en la forma que tiene un refrán

y la ansiedad ya no me toma

ni por sorpresa, ni por detrás.


La paz de los pensamientos

en poemas se suele transformar

y se vuelven dibujos en el viento

o en botellas lanzadas a ultramar.


LP DD


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