Escribo para sanar

 Escribo para sanar

Me escribo otra poesía

porque la fantasía no para

y se me desgarra el alma,

¡A pura alegoría!

Cuando en una caverna oscura

mi vista se perdía

y mi boca quedaba muda

en dudas que rugían.

Porque tú y yo existimos

en los pronombres tácitos,

implícitos en el mismo,

algoritmo que hoy es fáctico.

La inteligencia es un medio

para un fin específico,

que es generar remedios,

para todos los conflictos.

Y usarla de otro modo

es un vil sacrilegio,

no sirve de nada el oro,

guardado en un banco Sueco.

Y si el suelo destrozamos

para poder extraerlo,

terminaremos todos muertos,

en este maldito calvario.

Padre nuestro cotidiano

del pan envenenado,

dáme el bendito intelecto,

para no hablar en vano.

Porque al vaso de veneno

lo tengo siempre a mano

y de beberlo tengo miedo,

porque es un trago amargo.

Y aunque amago con el codo

en un intento de suicidio,

no será esta mano,

la que cometa mi homicidio.

Y cual poeta maldito

evitare escribiendo,

aquel whisky maldito,

que Bukowski bendijo riendo.

Dejaré que las rimas

emborrachen mis días,

porque si bebo poesías:

¡La resaca es la Alegría!

Sublime fantasía 

con las que Cortazar soñaría,

no estoy en su cabeza,

pero es la misma sinfonía.

Fuí siguiendo las partituras

escritas en larga azaña,

que hasta con brocha y pintura

escribió la araña.

Para decir que los poemas

nos dicen de manera extraña,

que cuando se acaben las guerras,

será el día después de mañana.

Desde el Cantar de los Cantares

pasando por San Juan de la Cruz

e incluyendo a los cantantes

a los que hoy clavan en la Cruz.

Todos esos escritores cual Jesús,

que hayan sido cancelados;

Han escrito versos vigentes aún,

que no pueden ser borrados.

LP DD