Esas vidas duran poco

 Esas vidas duran poco

Sí tirado y destruido,

te sientes abatido;

y al costado del camino,

permaneces moribundo.

Es profundo tu sentir,

pero sí hay otro rumbo,

al que apunto porque sí;

porque yo vengo de ese mundo.

Mudo modo de vivir,

riendo entre los mudos;

que se mueren por vivir,

pero son sordos sus oídos.

Y que se mueren sin reír,

ni contemplar los pío pío;

vaya modo de vivir,

hablando de mi suicidio.

Sí sentís el sacrificio,

que de oficio hoy vivís;

y no reís en tu delirio,

que de vicio resistís.

Te vas a reír de mí

y de mi fuego valyrio;

que resucito por ahí,

en las pistas del destino.

En pollera y a los gritos,

digo y canto en disimulo;

no soy mulo de los gringos,

soy el giro más profundo.

Y no dudo de mi cielo,

ciego misterio que eludo;

porque puedo ser un ciego,

pero me niego a estar mudo.

Por eso las vidas duran poco

porque poco es lo titilan

y no brillan más que un foco

que tampoco alumbra su día.

Y en esos días me desenfoco

y de a poco se pierde la alegría

y mis plegarias van a un pozo

y en esos sollozos se pierde la vida.

La mía, la tuya y la de María,

que esperaría un aleluya;

si fuera suya la mejilla,

que en tus lágrimas se contractura.

Futura foto de herejías,

que predecían la fractura;

en las facturas que leías,

en tu propia sepultura.

LP DD