Al borde del abismo

 Al borde del abismo

Cuando sientas que la vida 

te empuja a un rumbo nuevo,

por favor no te resistas

o puedes terminar muerto.

Y no hay amuleto que resista

la furia de los Capuleto,

que protegen a sus Julietas,

separándolas del resto.

Como si en ese gesto

de insoportable rabieta,

no me diera cuenta del cuento.

que le cuentan a mi Julieta.

Y ella se da cuenta de nuevo

de que la tienen quieta,

negándole al mundo entero,

la paz que tanto anhela.

Porque en la lucha se esconde

la semilla de la duda,

que germina cuando y donde,

caminás en la penumbra.

Y a la sombra de la luna

al filo del horizonte,

te cavas tu propia tumba,

si no cantan los sinsontes.

Somos unos saltimbanquis

amantes de la rumba,

que aunque hacen ski,

entre muertos deambulan.

Y encima estamos ciegos

aunque nuestros ojos emulan,

leer a todos esos griegos,

que se ríen desde su tumba.

Mientras nosotros al filo

del precipicio que acecha,

cual fiera que muestra el colmillo

y se relame la noche entera;

Vamos construyendo andamios

cual plácidos horteras,

que no ven a la pantera,

que los manipula hace años.

Al borde del abismo vivo

y muriendo salto al vacío,

cuando pierdo mi sustento,

por comer más que el vecino.

Y a mi estómago hambriento

le miento diciendo mitómano,

no pudo Herodes con mi nacimiento,

no lo harás tú libertario pirómano.

Pero es ahí cuando se da el cambio

el verdadero que siempre quisimos,

es justo antes de extinguirnos,

que vemos la vuelta del destino.

Al que asentimos compungidos

mientras decimos no la vemos,

no vimos los que tuvimos

y por eso és que lo perdimos.

Pero no me rindo y persevero

cual Cancerbero redimido,

conmigo el destino fué severo

y de nacimiento estoy maldecido.

Y con el cuerpo adolorido

escribo un evangelio eterno,

cómo el eterno desafío,

de despertarnos del sueño.

Colectivo coma etílico

en el que morimos entre comas,

y sin puntos suspensivos,

no nos reímos de las bromas.

Que hoy retornan a esta Roma

de calambures sensitivos,

mientras mis letras se enamoran,

de espíritus combativos.

LP DD