Saltando el muro
Saltando el muro
Saliste del estrado barato
en el que estás metido
señalando lindo
con tu dedito chiquitito
que me apunta y me señala
pensando que es una hazaña
tu maña de decirle hasta mañana
a quien te viene a criticar
con una altura que redunda la duda
en la que te parás,
mientras yo camino en zancos para atras
y tu boca no me toca
ni me salpica
la diarrea que suelta
tu lengua hambrienta
que termina lamiendo
el helado de vómito propio
que soltó tu cerebro roto
sin otro argumento
que faltar el respeto
a quien te enfrentó,
se congela tu vomitada
por la helada
de mi ada madrina
que sin barita
abatirá tu cancioncita
hasta bajar la temperatura
por debajo del punto
de congelamiento cerca del zero
absoluto en tributo a los caidos
en los combates del destino.
Sé que es largo y confuso el camino sinuoso que te muestro y desenvuelvo frente a tus ojos que no siendo ciegos quedan bizcos o cruzados por la velocidad e intensidad en lo traumático revelado en el desparpajo de palabras y letras que de sílaba en sílaba te llenan la cabeza de sonidos rimantes que te hacen amarme en contradicción con tu intención sádica que pretende destruirme.
Si sentís que se hunde tu estima que rebota en mi ensia y sale a la tarima para pisar la pista y te despista de tu autopista que a simple vista no te llevaba a la playa sino a morder la manzana que sale de la cabeza de mi gusano que es el veneno o disparo certero que te desparrama el cráneo por todo el escenario compañero. ¿Ves el esmero que le meto a esto? ¿O solo escuchas otro cuento barato? No te quedan muchos intentos y menos que eso si queres permancer ileso, porque mi ceso te pone un yeso por eso de la fractura que la factura de mi rima esdrújula le causo a tu autoestima, la misma que asumía la fallida postura idiota de alguien que anda en ojotas escapando de la policia.
Francisca Chavez
Comentarios
Publicar un comentario