Será la melancolía


¿Será la melancolía 

de una vida sin receta

que sólo encuentra respuesta

cuando se vá la luz del día?

¿O será que la ironía

de una vida que está muerta

no te deja ver las rejas

por las que entra la luz del día?


Si no ves una salida

en la vida que tenés

y entendés que la partida

de la vida es ajedrez.

Por perdida no la des

si te queda una ficha,

esta ficha va a ser el rey

o la reina de tu vida.


A esa ficha no la perdés

porque serías un suicida,

ni siquiera tirando el rey

se abandona una partida.

Esa ficha es lo que tenés

eres tú contra Godzilla,

Boby Fisher jugaba bien

pero Kasparov no le temía.


¿Cuantos partidos diarios

de ajedrez podés jugar?

¿Y cuánto tiempo tenés

para jugarlos tranquilo?

¿Quién juega con ese rey

que trabaja los domingos?

¿Y qué partidos te perdés,

sólo por no haber ido?


Es muy poco divertido

perder de a poco el tiempo

y es un lamento repetido

escrito durante milenios.

Efímero es el que tenemos

y no vemos el que tuvimos.

Y tanto tiempo perdimos

pensando sólo en el nuestro.


Sin ver ni tocar lo eterno

entre peros vive tu boca,

te sofoca irte al infierno

y ese miedo es tu horca.

Lo siniestro que nos toca

es a costa del silencio,

necio cómplice del miedo

que de su lado te coloca.


Si nada sale de tu boca

cuando ves el sufrimiento,

lamento que sea mi boca

la que te mande al infierno.

Evocando a lo siniestro

del destino que te toca,

tomá tu pasaje al infierno

te lo mandó Dios por Oca.


Poca cosa resultaste

y de visitante te perdiste.

No la viste, ni miraste,

Sólo pensaste y quisiste.

No pensaste qué quisiste,

ni aprendiste de lo que pasaste.

E ignoraste lo que tuviste

y que tú, viste en Marte.


Maldito egoísta infame

destruiste la tierra solito

y quisiste vendernos Marte,

para no parecer un enfermito.

Vos sos nuestro meteorito,

no sos una obra de arte,

a tus desastres me remito

y al Cantar de los Cantares.


De magnate tu grandeza

y magnífica tu pobreza

de riquezas tus tristezas

y tus miserias de cabeza.

Tus penas mis alegrías

y mis poesías tus condenas,

mis cadenas alegorías

y la sabiduría, en poemas.


Filosofía en las poesías

y las armonías del viento,

no en tus vanos inventos

repletos de hipocresía.

En tus intentos no hay salida

mi salida es conocimiento,

conociendo hice ingeniería

que hora estás destruyendo.


Me voy yendo a porfía

porque el día va muriendo,

estoy sonriendo todavía

no sabía si escribir ésto.

Tampoco sabía del sueño

eterno en el que habitan,

los que riman sin dueño

y son dueños de su vida.



LP DD




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